SANTE 41 | studio BONBA

El proyecto de estructura típica de finca regia del Eixample barcelonés. Vivienda pasante, articulada por dos patios de luces, muros de carga y forjados con revoltón cerámico.

Ya había sufrido una reforma hace 20 años, y lo había dejado todo muy diáfano. al pasar el tiempo la forma de vivir evoluciona y esta vez el cliente, quería otra habitación más, pero manteniendo lo diáfano al máximo posible.

El cliente le gustaba el color blanco, que es como estaba inicialmente y quería mantener la igual. Para huir de todo al blanco se propuso utilizar materiales neutros y naturales, que haría el lugar lo más neutro posible y a su vez cálido.

El proyecto consiste en una gran caja de madera de roble macizo, situada en la parte central, la cual alberga diferentes funciones, cocina-lavadero-baño y tercera habitación., que se esconden detrás de los paneles correderos y las puertas enrasadas del mismo material.

Este volumen articula la vivienda en dos, día y noche, unas puertas a toda altura escondidas en él, también en roble, indican el corte.

Se utilizo microcemento color gris claro, para el pavimento del salón y cocina, zócalos y revestimientos del baño principal. En el salón se quería un sofá lo más grande posible, para ello se realizó la estructura de obra, ya que el espacio era reducido.

En la habitación principal, el volumen se despliega formando el cabezal y dejando a la vista el vestidor lacado en un gris claro.

 El baño en suite, un pedazo de baño con vistas a Barcelona, por este motivo se integró la bañera y la ducha al lado de la ventana. El mueble del lavabo lo separa de la habitación, con un espejo circular con soporte, permitía seguir viendo las vistas.

Para dar calidez al espacio y además permitir realizar las distintas rutinas que el cliente tenía si molestarse, se puso una cortina de terciopelo color topo.