Artchimboldi Barcelona

The entrance to Artchimboldi is through a cube designed in untreated pine wood and textured glass, which allows light to enter and at the same time creates a welcoming space. Inspired by the tradition of feng shui, the entrance to a space is especially important because it is the beginning of everything, it gives importance to that initial moment and helps to order the space. 

Inside the space, several sliding doors with exposed guides have been installed, always made from wood and textured glass, which allow the work areas to be separated or integrated with a simple movement and make the most of natural light. This intervention sought to improve functionality and provide greater flexibility to the interior spaces, allowing them to be enlarged or reduced according to the needs of the visitors. "Companies need flexibility to meet, divide into groups, move furniture, change the set-up, it needs to be possible to do this naturally," explains Anna.

The separating doors, as well as the access doors to the bathroom and the entrance cube, have a height of about three metres, a slenderness and lightness that has been enhanced by using the thinnest possible wood profile (5 cm). 

In the gallery, pinewood benches have been installed, which continue the intervention of the rest of the spaces and make it a pleasant space with plenty of light for meetings in small groups. 

Access to the bathrooms was through a small dark corridor, so it was decided to install two access doors on each side, in pine wood and textured glass, and to connect both bathrooms with a glass partition that allows more light to enter and a better view of the details of the forging. 

In addition to the introduction of these wood and glass elements, Emma and Anna wanted to "clean" Artchimboldi of superfluous or insignificant elements, always with the idea of simplifying, going to the essence, creating a harmonious space. In this sense, the ceilings were eliminated to increase the spaciousness and height of the rooms. Lighting guides were installed with spotlights to simplify the lighting, in addition to highlighting the construction system and other elements, such as the heating/air conditioning system. For the latter, a galvanised steel spiral tube painted white was chosen.

In fact, with a few exceptions such as the passageways, which are painted black, white was preferred to brighten up the workspaces.

The renovation of this modernist dwelling represents a commitment to the preservation and appreciation of the city's architectural heritage, while adapting it to the needs of a versatile and multi-purpose space.

Anna has made the furniture selection, sourcing from European markets and creating unique modular pieces, such as the meeting tables, which allow for versatile and functional use and which they also sell on request to their clients. In this sense, Anna's intention is to connect people in a deep way, to explore hospitality as a conduit for belonging, comfort, empathy and trust. "We feel we belong when we recognise ourselves in those around us, that's why simple, close beauty is important. At the heart of hospitality is a sense of community," explains Anna.

[ES]

El acceso a Artchimboldi se realiza a través de un cubo proyectado en madera de pino sin tratar y cristal texturizado, que permite la entrada de luz y a la vez crea un espacio acogedor. Inspirándose en la tradición del feng shui, la entrada a un espacio es especialmente importante porque es el inicio de todo, da importancia a ese momento inicial y ayuda a ordenar el espacio.

Dentro del espacio, se han instalado varias puertas correderas y con guías vistas, siempre fabricadas en madera y cristal con textura, que permiten separar o integrar las zonas de trabajo con un sencillo movimiento y  aprovechar al máximo la luz natural. Esta intervención buscó mejorar la funcionalidad y aportar mayor flexibilidad a los espacios interiores, permitiendo ampliarlos o reducirlos según las necesidades de los visitantes. “Las empresas necesitan flexibilidad para reunirse, dividirse en grupos, mover el mobiliario, cambiar el montaje, es necesario que se pueda hacer de manera natural”, explica Anna.

Las puertas separadoras, así como las de acceso al baño y el cubo de la entrada, cuentan con una altura de unos tres metros aproximadamente, una esbeltez y ligereza que se ha potenciado con un perfil de la madera lo más delgado posible (5 cm).

En la galería, se han dispuesto bancos corridos en madera de pino, que continúan la intervención del resto de los espacios y la convierten en un espacio agradable con mucha luz para reuniones en pequeños grupos. 

El acceso a los baños se hacía a través de un pequeño pasillo oscuro, por lo que se optó por instalar dos puertas de acceso por cada lado, en madera de pino y cristal texturizado, y conectar ambos baños con un cristal divisorio que permite la entrada de más luz y una mejor visualización de los detalles del forjado. 

Además de la introducción de estos elementos de madera y cristal, Emma y Anna han querido “limpiar” Artchimboldi de elementos superfluos o poco significativos, siempre con la idea de simplificar, ir a la esencia, creando un espacio armonioso. En este sentido, se eliminaron los cielos rasos para aumentar la amplitud y la altura de las estancias. Se instalaron guías con iluminación a través de focos que permiten simplificar el alumbrado, además de resaltar el sistema constructivo y otros elementos, como el sistema de calefacción / aire acondicionado. Para esto último, se optó por un tubo helicoidal de acero galvanizado pintado en blanco.

De hecho, salvo algunas excepciones como las estancias de paso que están pintadas en negro, se prefirió el color blanco para aportar luminosidad a los espacios de trabajo. 

La renovación de esta vivienda modernista representa un compromiso con la preservación y valoración del patrimonio arquitectónico de la ciudad, al tiempo que se adapta a las necesidades de un espacio de versátil y polivalente.

Anna ha realizado la selección del mobiliario, buscando en mercados europeos y creando piezas únicas modulares, como las mesas de reuniones, que permiten un uso versátil y funcional y que también venden por encargo a sus clientes. En este sentido, la intención de Anna es la de conectar a la gente de manera profunda, explorar la hospitalidad como un conducto para la pertenencia, el confort, la empatía y la confianza. “Sentimos que pertenecemos cuando nos reconocemos en quienes nos rodean, por eso es importante la belleza cercana, sencilla. En el corazón de la hospitalidad está el sentido de comunidad”, explica Anna.

Photography: Pol Viladoms